>
Compartir
WhatsApp

El precio de los coleccionables aumenta hasta diez veces con la segunda entrega

El precio de los coleccionables aumenta hasta diez veces con la segunda entrega
NOTICIA de Javi Navarro
29.08.2007 - 11:35h    Actualizado 15.03.2023 - 11:57h

Con el final de año, siempre a partir de enero, o después de las vacaciones, en septiembre, aparecen puntualmente cada temporada los anuncios que animan a los consumidores a hacerse con colecciones de lo más variado. Libros, películas, muñecas, cursos de idiomas, reproducciones de coches… son sólo algunos ejemplos de todo lo que podemos empezar a encontrar desde ahora en el kiosco. Conoce los consejos a tener en cuenta antes de desembolsar tu dinero en alguna de estas colecciones sin fin.


La Confederación de Consumidores y Usuarios (CECU) quiere recomendar a los interesados en realizar alguna de estas colecciones por entregas que antes de adquirir el producto se informen del coste total, el número de entregas y el tiempo que llevará completar la colección. Hay que tener en cuenta que, normalmente, el precio del primer fascículo suele ser más bajo para atraer al consumidor.

Porque los consumidores consideran que los principales motivos para no completar una colección son, en primer lugar, el elevado coste total y, en segundo, que en muchas ocasiones se hacen excesivamente largas. Además, a veces entienden que, conforme se avanza en la colección, esta va perdiendo calidad y no cumple con las expectativas iniciales. Otras veces se encuentran con el problema de no haber podido encontrar algún fascículo de la colección porque la editorial haya dejado de publicarla o que, tras haberse agotado en los kioscos, no pueden conseguir fácilmente las entregas atrasadas.

También es posible que la primera entrega se acompañe de la segunda al mismo precio, con lo cual se puede pensar que el coste de la colección es menor. Sobre este ‘gancho’ comercial hay que tener en cuenta que a partir del segundo fascículo su precio aumenta de forma considerable. CECU ha podido observar que este incremento se acerca al 150 % de media, llegando en algunos casos a aumentar 10 veces su valor (pasar de 1 € la primera entrega a 9’99 € las similares a esa primera) o a subir hasta 10 € (de 9’95 € a 19’95 €).

Por otra parte, hay que contar con algunas entregas especiales que incluyen partes esenciales para la colección y cuyo precio es distinto o con extras para la colección como estuches, expositores o archivadores, que tienen un precio propio.

Es importante, por lo tanto, que en el primer fascículo o en su publicidad venga reflejado el número total de entregas y el precio de cada una, algo que no ocurre siempre, en cuyo caso sería interesante que el consumidor se informe por otras vías (a través de su quiosquero, Internet, en la editorial…).

También es recomendable que no se comience la colección sin estudiar si el contenido completo de la colección merece la pena, observando lo que se incluye más allá de las ofertas de lanzamiento. En este sentido, puede ser interesante comprobar si en algunos casos adquirir la colección completa por otras vías puede ser más económico que realizarla por entregas.

Asimismo, siempre que sea posible, es preferible realizar una suscripción con la empresa editora de manera que se refleje por escrito de cuántas entregas consta la colección y el precio de las mismas. De este modo tendremos una garantía adicional de que la editorial debe completar la colección. En caso de que se deje de ofrecer el producto, deberemos reclamar a la editorial, indicando que se ha incumplido el contrato y reclamando que lo cumplan o devuelvan el importe íntegro.

Falta de información y transparencia en muchos coleccionables

Artículos coleccionables de todo tipo vuelven a la primera fila de la actualidad con la llegada de septiembre. La Confederación de Consumidores y Usuarios (CECU) ha analizado diversos ejemplos de este tipo de productos con el objetivo de comprobar si la publicidad que se hace de ellos puede generar confusión entre los ciudadanos. A la vista de lo analizado, se pueden observar que las entregas llegan a triplicar el precio del fascículo semanal según avanza la colección, no se especifican el total de entregas o, incluso, que las imágenes mostradas en televisión no se correspondan con los artículos de la promoción coleccionable.

Coleccionables por entregas

CECU quiere recordar a los interesados en realizar alguna ellas algunas cuestiones que deben tener en cuenta:

  • Las ofertas de lanzamiento y las primeras entregas suelen ser muy baratas, pero las posteriores se encarecen significativamente, por lo que debemos informarnos del número total de entregas y del precio de las mismas. Si no se indica el número de entregas el consumidor puede dirigirse a la propia editorial o a la página web de la misma, donde podrá encontrar información sobre la colección que le interese: el contenido de la misma (para verificar si realmente le interesa), número de entregas, contenido, precio, etc.
  • En algunos casos, la colección se completa con fascículos especiales o extras (expositores, encuadernaciones, piezas especiales que incrementan el precio normal de los fascículos…) con lo que el coste total de la colección puede verse incrementado.
  • Igual de importante es conocer la periodicidad de las entregas para saber el tiempo que nos va a llevar completar la colección, puesto que en algunos casos pueden ser años.
  • El usuario también debe analizar si, en algunos casos (como en las colecciones de libros o películas), puede resultar más económico adquirir la colección directamente y no por entregas.

CECU también destaca que, en algunos de estos coleccionables se llega a indicar que el editor se reserva el derecho a modificar el orden de salida y el precio de venta si las circunstancias así lo exigieran. En otros se advierte de que los títulos (por ejemplo, en el caso de una colección de libros) que aparecen en la fotografía publicitaria no tienen por qué corresponderse con los de la colección que se va a iniciar. Ambas advertencias pueden pasar desapercibidas a simple vista, puesto que no destacan, y CECU considera que este tipo de indicaciones son prácticas poco transparentes y que, como mínimo, pueden incitar a confusión a los consumidores.

A la vista de este tipo de situaciones, CECU recomienda a todas aquellas personas interesadas en realizar alguna de estas colecciones que antes de iniciarla se informen del número de entregas total que compone la colección, del coste de las mismas y de si existe alguna entrega especial que pueda conllevar un coste extra (vitrinas, expositores, encuadernación…), de forma que el usuario pueda calcular el tiempo que le llevará terminarla y el coste total: CECU ha comprobado que algunas colecciones, sobre todo cuando se trata de películas o series de televisión en DVD, pueden resultar más económicas adquiriéndolas en cualquier establecimiento directamente y no por entregas.

Por otro lado, CECU considera una buena iniciativa la posibilidad de asegurar la colección a través de una “reserva garantizada” en el punto de venta habitual, sin ningún tipo de desembolso económico añadido, aunque para ello deberían estar reflejados claramente en el folleto informativo los datos completos sobre la colección (número de entregas, precio de las mismas, periodicidad…) de cara a que el usuario pueda valorar si le interesa hacer esa reserva.

Sólo tres de cada 10 termina los coleccionables

Casi el 80 % de los consumidores ha empezado alguna colección por entregas, pero el 35 % nunca las ha acabado. Artículos coleccionables de todo tipo vuelven a los kioscos con la llegada de septiembre y son muchos los consumidores que se interesan por ellos. De hecho, según los datos de un sondeo realizado por la Asociación Valenciana de Consumidores y Usuarios (AVACU), entidad miembro de CECU, más del 78 % de los ciudadanos ha comenzado en algún momento una colección.

¿Y terminarlas? Un 65 % ha completado alguna de las que ha empezado y un 35 % nunca las ha terminado, señalando como principales motivos para no acabarla su elevado coste total, que sean excesivamente largas o una progresiva pérdida de calidad en los fascículos conforme se avanza en la colección defraudando las expectativas que los consumidores tenían en un principio.



WhatsApp Casacochecurro