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El 75 % de las empresas familiares españolas mueren por estar mal gestionadas

El 75% de las empresas familiares españolas mueren por estar mal gestionadas
NOTICIA de Javi Navarro
09.02.2011 - 19:55h    Actualizado 22.03.2023 - 16:35h

El 75 % de las empresas familiares españolas no pasa de la tercera generación. ¿Motivos? Una gestión deficiente, que lleva a estas compañías, más de dos millones y medio en España que suponen el 70 % del PIB y del empleo español, a desaparecer. Las soluciones pasan por una adecuada consultoría externa y la profesionalización de sus equipos de gestión.

Empresas ¿hasta la tercera generación?

Las empresas familiares españolas tienen problemas de organización y el 75-80 % no pasan de la tercera generación por problemas de organización interna en la mayoría de los casos. Los estudios constatan esta cifra, y también que menos del 50 % pasan de la segunda generación. Y estos datos, para un país como España con más de dos millones y medio de empresas familiares que aportan casi tres cuartas partes del Producto Interior Bruto, es un verdadero problema. Sobre estas conclusiones se ha hablado hoy en el I Congreso de Coaching, organizado por la Asociación Española de Coaching (AECOP), que se celebra en el Colegio de Médicos de Madrid.

Jose María Gasalla, conferenciante y profesor de Esade Business School alerta sobre los principales problemas que se ha encontrado en sus 30 años de experiencia en el asesoramiento a empresas familiares. Según Gasalla “los mayores lastres son la falta de una cultura organizacional y el síndrome de la velocidad, por el cual los propietarios tienden a colocar en puestos directivos a sus generaciones más jóvenes sin que estos hayan tenido una experiencia profesional en el exterior en la que adquirir una mayor perspectiva”.

Además, Gasalla también apunta a la confusión que muchas veces se produce en este tipo de empresas entre lo que es la familia y la propia empresa, y el propio rol de los miembros con puestos directivos y su situación como miembro de la familia propietaria. “Básicamente -añade Gasalla- nos encontramos muchas veces con casos en los que existen de facto dos empresas, la que forman los miembros de la familia propietaria y los demás empleados, y es ahí donde falla la organización a menudo, puesto que para aumentar la productividad la confianza debe delegarse también a esos empleados que no son familiares”.

Impacto decisivo en la economía y el empleo
Los expertos también han incidido en el negativo impacto sobre la economía y el empleo que tiene la destrucción de empresas familiares. Gasalla no obstante puntualiza que “traducidas a años esas dos o tres generaciones que suelen durar las empresas familiares, los estudios tampoco indican que otro tipo de empresas tengan una mayor longevidad, sin embargo el mayor peso que las familiares tienen en la economía invitan a hacer una reflexión para solucionar sus problemas”. “Un adecuado trabajo de coaching en las empresas familiares con una estructura de varias personas o departamentos, propiciaría que se destruyeran muchos menos miles de empresas todos los años, lo que redundaría de manera sustancial en la marcha de la economía y el empleo en nuestro país, y más en momentos de crisis como los que atravesamos”, apostilla Gasalla.

Sin embargo, los expertos son conscientes de la dificultad que entraña llevar el coaching a muchas pymes, una disciplina a medio camino entre la consultoría y la psicología. José María Gasalla, autor del libro “Quién lidera, confía”, basado en su experiencia asesorando empresas, ve tres problemas principales para que los gestores de empresas familiares vean cómo realmente podrían aumentar su rentabilidad pidiendo asesoramiento externo: “la primera excusa es económica, se preguntan para qué van a gastar dinero si ellos ya conocen su empresa, luego están la falta de tiempo y por supuesto en todo subyace el desconocimiento o la ignorancia de cómo funciona el coaching. La cuestión es que justamente lo que les podría dar el asesoramiento son ideas para optimizar ese tiempo y su organización para que, basado en la experiencia de otros, fueran más rentables. Y eso es una inversión eficaz, no un gasto”.

El 80 % de las empresas familiares no tiene planificado el proceso de sucesión

Más del 80 % de las empresas familiares españolas aún no tiene planificado el proceso de sucesión. Así se pone de relieve en una encuesta previa realizada a 700 empresas que han participado en el Programa Pyme Familiar, puesto en marcha por las Cámaras de Comercio. El programa sensibiliza, apoya y orienta a las pymes familiares en la superación de los obstáculos que impiden un cambio generacional ágil y fluido.

La misma encuesta pone de manifiesto que el 43 % de los propietarios de las empresas encuestadas afirma, al inicio del programa, no haberse planteado aún hacer testamento.

La mayoría de las empresas familiares consultadas (43,8 %) se encuentran en su fase fundacional, es decir en su primera generación. Le siguen, muy de cerca, las de segunda generación (39,6 %) y sólo el 11,8 % afirma estar ya en la tercera generación.

En cuanto a la facturación, de las 700 empresas familiares encuestadas cerca del 40 % tiene una facturación anual bruta entre 500.000 y 2 millones de euros; el 32,5 % más de 5 millones de euros; el 17 % menos de 500.000 euros y el 11 % se sitúa en la horquilla entre 2 millones y 5 millones de euros.

Por tamaño, el 42 % de las empresas encuestadas tiene entre 2 y 9 empleados, seguidos de las compañías de entre 10 a 25 empleados, que suponen el 33,5 %. Un 13, 7 % tiene empleados entre 26 y 39 personas; un 5,5 % está entre la horquilla de 50 a 250 y un 5,4 % es autónomo.

Miembros de la familia en la empresa
En cuanto a la participación familiar en la empresa, el 26,2 % afirma tener a dos familiares empleados; un 23,7 % a tres miembros de la familia; el 16,6 % a un total de cuatro y sólo un 5,2 % afirma tener más de seis familiares en la empresa.

La presencia de la mujer en la empresa ha sido otro de los elementos analizados. Así, el 49,8 % de las empresas familiares encuestadas afirma tener menos de un 25 % de mujeres en su plantilla; el 25,4 % entre el 26 % y el 50 %; un 15, 7 % está en el tramo de entre el 51 % y el 75 %, mientras que sólo un 9,1 % de las empresas tiene más del 75 % de presencia femenina en la compañía.

Por último, en cuanto a la naturaleza jurídica de la empresa, el 58,9 % son Sociedades Limitadas, seguidas del 16,7 % que son Sociedades Anónimas, seguido muy de cerca los empresarios individuales, con un 16,6 %.

65 % del PIB y 80 % de los puestos trabajo
Pyme Familiar, Puente al Futuro
El programa “Pyme Familiar – Puente al Futuro” de las Cámaras de Comercio es un programa cofinanciado por el Fondo Social Europeo, cuyo objetivo es sensibilizar, apoyar y orientar a más de 1.200 pymes familiares, en la superación de los obstáculos específicos que impiden un cambio generacional ágil y fluido.

Durante 2007 y el primer cuatrimestre de 200 se han llevado a cabo en las Cámaras participantes 130 talleres interactivos, de 8 horas de duración dirigidos a empresas familiares. En los talleres, además de analizar contenidos específicos relativos a la sucesión y el protocolo familiar, las empresas han realizado un autodiagnóstico que les ha permitido obtener un informe que recoge los aspectos claves de la empresa.

Las empresas familiares son las que más empleo generan

“La empresa familiar española es, tras la alemana, la que más empleo genera en Europa y está demostrado que este modelo consigue crear más valor añadido y con mayor rapidez que otros negocios de tamaño similar pero que reparten su capital fuera de la familia”, ha señalad el presidente de la Cámara de Madrid y de CEIM Confederación Empresarial de Madrid-cEOE, Arturo Fernández, que ha pedido el reconocimiento y apoyo a la actividad de las empresas familiares por parte de las administraciones públicas porque “está demostrado que este modelo consigue crear más valor añadido y con mayor rapidez que otros negocios de tamaño similar pero que reparten su capital fuera de la familia”.

Según un reciente informe de la consultora Ernst & Young (The Role of Family Business in the European Economy), la empresa familiar española emplea una media de 739 trabajadores, sólo por detrás de los 984 asalariados en las alemanas.

“Para evitar nuevos ajustes de plantilla en las empresas de toda índole es necesario apoyar su actividad y perduración en el tiempo”, ha señalado el presidente de la Cámara de Madrid y de CEIM, que ha ilustrado el caso con la situación crítica que vive el sector del comercio al por menor: “El empleo en los comercios al por menor en España volvió a retroceder en junio un 1 % con respecto al mismo mes de 2009, encadenando así 23 meses consecutivos de descensos. Y aunque las ventas del sector en nuestra comunidad autónoma parece que siguen dando signos de recuperación (3,7 % en junio), no podemos bajar la guardia”.

“Es un motivo fundamental para que la Cámara de Comercio de Madrid aporte su experiencia en facilitar la continuidad de las empresas que no encuentran un emprendedor en el entorno de su fundador dispuesto a tomar las riendas de su actividad”, concluye Arturo Fernández.

El proyecto piloto que la Cámara de Madrid puso en marcha el año pasado para evitar los cierres empresariales en los negocios familiares por falta de sucesor se ha convertido en una acción más ambiciosa, que pretende llegar a todo tipo de empresas en situación de transmisión, y en la que colabora con al Consejo Superior de Cámaras de Comercio y la Dirección General de Pymes del Ministerio de Industria, Turismo y Comercio. Se trata del servicio de Continuidad Empresarial, que cuenta con un portal propio en Internet (www.plancontinuidadempresarial.es).

Pasado, presente y futuro
El servicio de Continuidad Empresarial es un punto de encuentro entre los empresarios que concluyen su actividad y aquéllos dispuestos a recoger su testigo. Unos y otros reciben de los técnicos de la Cámara de Comercio de Madrid diferentes servicios de apoyo a la compraventa:

• Servicios para el empresario que concluye su actividad

1. Análisis detallado de las posibilidades de traspasar su negocio, mediante la elaboración de un dossier de empresa, así como asesoramiento personalizado a lo largo de todo este proceso sobre los pasos y obligaciones a cumplir

2. Elaboración de una estrategia que marca las fases de promoción del negocio y planifica la búsqueda de compradores

3. Difusión de la oferta a través de: las páginas web asociadas a este programa, (entre ellas, camaramadrid.es); el servicio de Ventanilla Única Empresarial, que en la Comunidad de Madrid tiene su sede en la Cámara de Comercio; otras herramientas de comunicación de la Cámara de Madrid, como son los boletines de información bajo suscripción, la revista o el servicio de noticias económicas

4. Bases de datos empresariales de las Cámaras de Comercio

• Servicios para el emprendedor o empresario que busca negocios abiertos y disponibles en el mercado:

1. Relación de negocios en traspaso, que están disponibles en el “tablón de ofertas” de Plandecontinuidadempresarial.es, que cuenta con un buscador de ofertas por negocios concretos de posible interés, entre otras utilidades.

2. La Cámara de Madrid informa al interesado sobre el negocio en venta, entrega el dossier de empresa, resuelve dudas y acompaña al comprador a las visitas.

3. Asesoramiento en el proceso de compraventa y en la creación de la nueva sociedad

Las empresas familiares viven más que las que no lo son

Desde el punto de vista de la edad, el promedio de las empresas familiares es de 37 años, superior a los 31 años de las empresas no familiares. Esta es una de las conclusiones del estudio “La longevidad y el tamaño de la empresa familiar”, realizado por la Cátedra de Empresa Familiar del IESE y patrocinado por la fundación Jesús Serra del Grupo Catalana Occidente. El objetivo del estudio era determinar la edad de las empresas familiares españolas que superaban los 50 millones de euros de facturación en el año 2005 y compararla con la edad de las empresas familiares de ese mismo rango.

Esta investigación, dirigida por el profesor del IESE Josep Tàpies, ha involucrado a 2.254 empresas españolas tanto familiares, como no familiares y sus conclusiones se muestran en un libro que ha editado la Fundación Jesús Serra bajo el nombre “Empresa familiar: ni tan pequeña, ni tan joven”.

El estudio demuestra, además, que hay empresas familiares que cuentan con más de dos siglos de antigüedad, mientras que ninguna empresa no familiar ha alcanzado una edad semejante. Entre las empresas familiares más antiguas de España encontramos a Codorníu, Miquel Costas & Miquel, Gomà Camps y el grupo Osborne, empresas que nacieron antes del siglo XIX y que siguen en plena actividad.

En cuanto al tamaño, el estudio demuestra que esta forma de propiedad y gestión está muy presente en el grupo de cabecera del tejido empresarial español. El 57 % de las empresas españolas con ventas superiores a los 50 millones de euros en 2005 eran empresas familiares. Su facturación equivale al 35 % del total generado por el conjunto de empresas de la muestra (2.254 empresas); y dan empleo al 42 % de las personas que trabajan en ellas. Las 100 mayores empresas familiares facturaron entre 350 y 15.000 millones de euros.

La investigación también destaca el importante papel de la empresa familiar en algunos sectores de la economía española y su participación masiva en sectores como: alimentación, construcción, inmobiliaria, comercio y metalurgia.

Las claves del crecimiento
Por último, el estudio analiza las estrategias más habituales que siguen las empresas para lograr el éxito. Así, el libro reconstruye varios casos de empresas familiares exitosas, bien porque han conseguido una longevidad importante, bien porque en pocas décadas han alcanzado un tamaño muy destacado en el panorama empresarial español. El libro recoge también algunos ejemplos seleccionados de empresas extranjeras muy longevas.

A la luz de los casos estudiados, Tàpies concluye que la longevidad de las compañías familiares está influida por los siguientes parámetros: la unidad de la familia, su compromiso con el proyecto empresarial, la capacidad de innovar y la facilidad para adaptarse al entorno manteniendo una filosofía propia.