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Cada vez más gente miente en su CV para esconder su sobre cualificación

Cada vez más gente miente en su CV para esconder su sobrecualificación
NOTICIA de Javi Navarro
17.02.2011 - 21:45h    Actualizado 20.01.2023 - 14:08h

El creciente grupo de desempleados cualificados, ante lo difícil de la situación de encontrar empleo, están intentando optar a puestos de menor cualificación o, incluso, a puestos que no estén relacionados con su experiencia, trayectoria profesional o formación. En los últimos meses, Adecco ha constatado un incremento de entre el 5 % y el 10 % de candidatos que para optar a un trabajo por debajo de su cualificación deciden “enmascarar” u “ocultar” en su CV parte de su formación o experiencia con el fin de no ser descartados en un proceso de selección por estar sobre cualificados para el puesto al que optan.


Esta tendencia, sin ser la predominante en los procesos de selección, puede tener consecuencias negativas para el propio trabajador, así como para la empresa contratante. Desde el punto de vista del trabajador, lo que de manera inmediata puede ofrecerle una oportunidad laboral, en el medio y largo plazo puede provocar que éste se sienta infravalorado en el puesto de trabajo dando lugar a frustración y falta de motivación. Desde el punto de vista de la empresa, la sobre cualificación de un trabajador suele ser sinónimo de “rotación”, puesto que en cuanto el empleado encuentre una oportunidad laboral acorde a su formación, trayectoria profesional y responsabilidades, abandonará la empresa y dará lugar al inicio de un nuevo proceso de selección.

Para optar con éxito a un puesto de trabajo, siempre es recomendable adaptar al máximo el CV a las potencialidades de la oferta, haciendo hincapié, precisamente, en los aspectos de nuestra trayectoria profesional que más se adecuen a las exigencias del puesto, pero sin omitir información importante, ya eso rompería la relación de confianza establecida entre empresa y trabajador.

Por todo ello, Adecco ha querido analizar esta tendencia que viene cobrando fuerza en los últimos meses y ofrecer alternativas y oportunidades a todas aquellas personas que estén en búsqueda de una nueva oportunidad laboral.

El error de los curriculum “B”

En los años previos a la crisis económica eran habituales las situaciones en que diferentes candidatos que optaban a un empleo maquillaban su curriculum elevando a la categoría de master o postgrados titulaciones online no homologadas o añadían a sus funciones dentro de la carrera laboral tareas que estaban por encima del puesto desempeñado.

Actualmente, desde Adecco se ha detectado una tendencia que aboga por el efecto contrario: algunos curriculum se están maquillando para ocultar información y así optar a un puesto de trabajo por debajo de la cualificación del candidato. Esta práctica se ha incrementado entre el 5 % y el 10 % de candidatos que, para optar a un trabajo por debajo de su cualificación, deciden “enmascarar” u “ocultar” en su CV parte de su formación o experiencia con el fin de no ser descartados en un proceso de selección por estar sobre cualificados para el puesto al que optan.

Es el caso de parados de larga duración, cifra que en España supera los dos millones de desempleados o el caso de perfiles jóvenes altamente cualificados que tienen dificultades para acceder a su primer empleo, puesto que según la Organización Internacional del Trabajo, España supera la barrera del 42 % de paro juvenil. Muchos de estos candidatos se encuentran con meses de búsqueda infructuosa de empleo, habiéndose visto descartados de varias ofertas con la justificación de tener un curriculum demasiado alto y es entonces cuando deciden optar por confeccionar un curriculum B.

Una práctica equivocada
Contra la satisfacción inmediata de obtener un empleo para el que antes el candidato estaba descartado por estar sobre cualificado, la omisión de datos en el curriculum es realmente una práctica poco recomendable, puesto que cuando una empresa descarta un CV por ser demasiado alto es porque verdaderamente no se ajusta con el perfil que necesitan. Acceder finalmente a ese puesto puede traer consecuencias no siempre positivas para el trabajador y para la empresa ya que la sobre cualificación en el puesto de trabajo lleva inevitablemente a la frustración para ambas partes.

La explicación viene dada por una doble vertiente: en primer lugar, aunque es cierto que en estos momentos las empresas tienen más candidatos entre los que optar para cubrir un determinado puesto, éstas aspiran a buscar al mejor candidato para ese puesto concreto. Los Directores de RRHH son conscientes de que tener a un trabajador sobre cualificado en un determinado puesto, dará lugar a una situación de incertidumbre en la que, en cuanto ese profesional encuentre un empleo más acorde a sus competencias, abandonará su puesto, con los consabidos gastos que esto supone para la empresa: abrir nuevos procesos de selección, rotación de personal en el puesto de trabajo, nueva inversión en formación, etc. Por no hablar del caso en el que la parte contratante descubra el engaño, puesto que tras una oferta de trabajo existe una labor de consultoría y de filtros para poder comprobar la veracidad de lo que afirma el candidato. En este caso se romperá la relación de confianza establecida entre empresa y trabajador afectando a posibles procesos futuros.

En segundo lugar, los propios trabajadores son conscientes de que aceptar un empleo por debajo de su cualificación podría sumirles en una situación de frustración que, a corto o medio plazo, podría afectar a su trabajo y a su vida personal. Esta situación casi siempre deriva en la desmotivación del trabajador debido a que el puesto no se ajusta a sus capacidades y por tanto puede ver afectado su rendimiento, consecuencia negativa para empresa y empleado. Esto a su vez genera una insatisfacción laboral que no es recomendable en ningún caso para ninguna de las partes.

Sectores y perfiles
A pesar del aumento de este tipo de prácticas entre los que buscan empleo, según Adecco, esta circunstancia no se está produciendo en la actualidad a nivel general, puesto que los desempleados con experiencia y cualificación no están aceptando masivamente trabajos que estén por debajo de su categoría profesional, y aunque estén parados, por ahora están esperando a encontrar ese trabajo acorde a sus expectativas profesionales. Sí es cierto, por el contrario, que si antes intentaban optar a la franja más alta de la retribución salarial correspondiente a su puesto, en estos momentos están dispuestos a aceptar la horquilla más baja de la misma.

Sin embargo, en casos puntuales y debido a la multiplicación de EREs, fusiones, reestructuraciones y otros procesos que han alcanzado a los puestos más cualificados de la empresa, así como el aumento de los parados de larga duración y de la tasa de paro juvenil, algunos perfiles cualificados están incurriendo en el error de hacer desaparecer de sus curriculum formación y experiencia para optar a puestos inferiores a los que hasta ahora desempeñaban.

Es el caso de personas que contando en su haber con dos carreras universitarias solamente citan una de ellas en el curriculum o personas que han cursado masters oficiales o postgrados y obvian esta titulación. También se está produciendo esta circunstancia entre candidatos con experiencia en gestión de equipos que al optar a un puesto junior en el que no se requiere llevar equipo, omiten esa parte de su experiencia o la rebajan.

En general, los sectores en los que más se detectan estas prácticas han sido en el comercial, en el sector de la banca y el financiero (directivos que optan a puestos de contables, controllers, etc.) y en todo tipo de puestos administrativos (a los que optan candidatos con licenciaturas o masters).

Buscando la alternativa
Desde Adecco se recomienda sinceridad y transparencia en el curriculum y en la posible entrevista personal posterior. La mejor opción para estos desempleados es abrir el campo de búsqueda y reorientar su carrera profesional con el fin de encontrar un empleo en estos tiempos tan complicados.

Una opción puede ser canalizar la experiencia profesional hacia el perfil buscado, destacando y desarrollando aquellas funciones o competencias requeridas para el puesto al que se quiere acceder. En definitiva, destacar los aspectos que puedan ser más y mejor valorados. A fin de cuentas el curriculum es una manera de venta activa del candidato hacia la empresa. Otra opción válida puede estar en el reciclaje profesional. Éste puede convertirse en una nueva motivación para la vida laboral del candidato y un modo de aprovechar el tiempo de desempleo para realizar cursos de formación orientados a aquellos puestos de trabajo en los que más oportunidades existan en la actualidad.

Si finalmente un candidato decide optar por un puesto de trabajo para el que está sobre cualificado es preferible que especifique en una carta de presentación cuáles son los motivos que le llevan a esta situación y cuáles son sus expectativas de futuro con respecto a ese puesto de trabajo. La empresa y el candidato podrán debatir las circunstancias y decidir conjuntamente si se trata del candidato más adecuado para el empleo. En cualquier caso, empezar una relación laboral con una mentira siempre es una mala opción. No debemos olvidar que la empresa optará por el trabajador más adecuado al puesto concreto que busca, nunca por el sobre o infra cualificado.

Soy español y estoy sobre cualificado para mi puesto de trabajo

Así es el parecer general de los españoles según un estudio de Randstad Workmonitor que compara a nivel internacional el nivel de formación que desempeñamos laboralmente para nuestro puesto de trabajo. Así, seis de cada diez (64 %) trabajadores en España considera que su formación es mayor de la que necesitan para el desarrollo de sus tareas, lo que les coloca a la cabeza de Europa sólo superados por Grecia (69 %). Si la muestra se compara con la media comunitaria, España se coloca 24 puntos porcentuales por encima, lo cual le sitúa lejos de países como Dinamarca (25 %), Holanda (32 %) o Alemania (43 %), entre otros. En relación con otros países, se encuentran diferencias. Mientras que en Estados Unidos el porcentaje de profesionales que piensa que su titulación está por encima de su puesto de trabajo es del 46 %, en China este ratio aumenta hasta el 84 % de los encuestados.

Un 64 % de los españoles se siente sobre cualificado para su actual puesto de trabajo y considera que su formación y experiencia están por encima de sus obligaciones laborales, según la tercera oleada del año del Randstad Workmonitor, estudio internacional sobre las expectativas laborales de los trabajadores. Este dato coloca a España en cabeza del ranking europeo sólo superada por la percepción de los profesionales griegos, que afirman de esta manera en un 69 % de los encuestados.

Déficit de profesionales cualificados
El Informe Internacional Randstad Workmonitor permite una radiografía de la actual situación laboral en Europa. De hecho, ha detectado una corriente que se extiende entre los ciudadanos comunitarios. A su juicio, las empresas actualmente tienen problemas para encontrar profesionales cualificados (45 %). Esta opinión oscila entre el 53 % de los alemanes o el 51 % de los franceses hasta el 33 % de los italianos, que ocupan el último lugar.

En el caso de España, un 35 % de los profesionales consultados mantiene esta opinión, lo que le sitúa diez puntos porcentuales por debajo de la media europea. Por el contrario, los que no se encuentran tan lejos son países como China o Estados Unidos, donde un 55 % y un 50 % de los encuestados, respectivamente, admiten que sus compañías no encuentran facilidades actualmente para encontrar profesionales de una alta cualificación.

Previsión para los próximos años
En este sentido, el Estudio establece una previsión en esta materia. Para cuatro de cada diez españoles (43 %) dentro de tres años faltarán en su empresa trabajadores cualificados, lo que le coloca en la media del ranking países europeos, que lideran Alemania (52 %) y Suecia (51 %). En el lado contrario se sitúan Holanda (33 %) y Dinamarca (34 %).

Desde la óptica exterior al ámbito comunitario, también hay diferencias, puesto que un 42 % de los encuestados en Estados Unidos asiente en esta línea y seis de cada diez profesionales chinos estiman que dentro de tres años en su compañía se necesitarán trabajadores de un perfil alto.

Las empresas apuestan por la formación
Si se pregunta por el interés que tienen las empresas en materia de formación, el informe Randstad Workmonitor también obtiene respuesta. Más de la mitad de los profesionales españoles (55 %) asegura que su empresa se encuentra invirtiendo en esta vía, lo que le sitúa un punto porcentual por encima de la media europea (54 %). A la cabeza del ranking se colocan países como Bélgica (65 %), Suiza (60 %) o Alemania (59 %), mientras que en el lado contrario se encuentran Grecia (32 %), Suecia (50 %) y Noruega (50 %), como los países donde las empresas invierten menos en formación, según sus trabajadores.

El problema de España con la sobre cualificación: hay más universitarios formados que puestos para sus conocimientos

Un 57 % de los trabajadores está sobre cualificado para el empleo que desempeña.

Podríamos encontrar el porqué de este desfase en el hecho de que España es un país en el que el nivel de estudios de su población, sobre todo en lo que se refiere a las enseñanzas de FP, universitarias y de posgrado, que han crecido exponencialmente mucho más rápido que la cantidad de puestos de alta cualificación en una economía que ha estado muy basada en el ladrillo y en el sector servicios. Es esclarecedor conocer que entre 1999 y 2009 el porcentaje de población española con estudios superiores pasó del 21 % al 30 %; entre los jóvenes, la tasa es del 39 %. Especialmente llama la atención entre los graduados con Master que un 54 % de ellos dice estar en esta situación. Más de la mitad de los profesionales con formación no encuentra un puesto de empleo de alta cualificación porque no los hay para todos.

Por tanto, España es el país de la Unión Europea con más trabajadores sobre cualificados. Un grave problema que arrastra España desde hace años y del que la Comunidad Laboral Universia ha querido hacerse eco a través de un estudio entre los usuarios de ambos portales. Los resultados son un claro reflejo del panorama macroeconómico sobre el que nos movemos: más de la mitad de los usuarios consideran que el trabajo que desarrollan no es adecuado a su cualificación.

Estudiantes.Cuando hablamos de trabajadores sobre cualificados nos referimos a aquellos que tienen un título universitario, post universitario o de FP de grado superior pero ocupan un empleo por debajo de ese nivel de formación. En este caso y en función de los datos obtenidos en el muestreo, estaríamos hablando exactamente de un 57 % de trabajadores usuarios, frente a un 19 % de media europea (dato de la oficina de estadística de la Unión Europea, Eurostat).

Pero no todos son malos datos. Dentro de las cifras recogidas se puede leer entre líneas un halo de esperanza: esta situación se les plantea a los usuarios como algo coyuntural: un 77,4 % de quienes trabaja en puestos cuya cualificación requerida es menor que la obtenida, ve su situación como algo pasajero (frente a un solo 22 % que deshecha la idea del cambio).

Parece bastante claro que estos los niveles de sobre cualificación son, por lo tanto, la consecuencia entre otras, de la panorámica que aparece detrás de un 20 % de paro general y un 45 % de paro juvenil.

¿Cuál será la tendencia en un futuro?
La tendencia parece ser que será al alza. José García-Montalvo preveía ya en 2009 que los niveles de sobre cualificación podrían aumentar más a medio plazo, puesto que, dada la situación económica actual por un lado muchas personas sin estudios o estudios medios que se han quedado sin trabajo han retomado la formación durante estos años de crisis, y por otro no hay ningún indicio de que pueda producirse un gran aumento de los empleos de alta cualificación en España. Nuestros datos avalan esta afirmación ya que un 82.7 % de los encuestados en paro con algún tipo de cualificación (FP, licenciatura, Master o Doctorado) aceptaría un empleo por debajo de su nivel de estudios.

Los españoles, sobre cualificados para los puestos de trabajo que desempeñan

Actualmente, numerosas carreras cuentan con muy poca oferta laboral para sus universitarios, por lo que muchos profesionales deben trabajar, ya sea momentanea o definitivamente, en áreas que no corresponden a lo que estudiaron, y, en muchos casos, que ni siquiera se asemejan. Más de 2.000 españoles respondieron la encuesta realizada por el portal Trabajando y Universia que intenta revelar alguna de las interrogantes sobre la formación académica de los españoles y el vínculo que tienen con sus puestos actuales de empleo. La gran mayoría, el 64 %, dice estar “sobre cualificados” para las funciones que desempeña en su puesto de trabajo.

A la primera pregunta, ¿crees que tu trabajo actual está realmente ligado con tu formación académica?, un 31 % responde que “en parte”, un 30 % dice que no está ligado en nada, un 25 % asegura que está ligado en un 100 % y finalmente un 14 % en muy poco.

La opción de comenzar la vida laboral bajo la fórmula del cooperativismo de trabajo, se ve como uno de los principales motivos de renuncia para miles de jóvenes que han visto truncada su carrera profesional a causa de la crisis y se ven obligados a aceptar cualquier trabajo, estén o no ligados a su formación.

Entonces, sobre lo anterior, ¿crees que estás “sobre cualificado” para las funciones que desempeñas en tu puesto actual?, un 64 % de los encuestados contestaron que sí, mientras un 36 % no.

Al momento de decidir seguir perfeccionándose y evaluar la posibilidad de realizar un postgrado, ¿piensas que estudiar un postgrado puede ayudar a conseguir un puesto laboral mejor? un 59 % de los españoles dice que influye, pero no es determinante, un 27 % que es fundamental y un 14 % asegura que no sirve para nada.

Javier Caparrós, Director General de Trabajando, señala que, “parte de las motivaciones personales de quien está o busca estar en el mercado laboral es; mejorar la formación personal, obtener un mayor grado académico, tener mayor posibilidad de un empleo y una buena remuneración, y así de este modo, conseguir una mejor posición en la compañía”.

Siguiendo en la misma línea, ¿cuándo crees que es mejor estudiar un postgrado?, el 39 % de los españoles asegura que es mejor hacerlo cuando se tiene 1 ó 2 años de experiencia, el 35 % opina que al finalizar la carrera y un 26 % cuando te sientas realmente consolidado en el mundo laboral.

“Son varias las ventajas que puede tener un profesional que decide complementar sus estudios con un postgrado, dentro de éstas algunas muy importantes son, diferenciarse de los demás en distintas aspectos, como puede ser desarrollarse profesionalmente, conseguir una posición de relevancia y en ocasiones, un aumento del salario”, añade Javier Caparrós.

A la última pregunta, ¿cuáles son las páginas que sueles consultar para informarte de dicho tema? Un 30 % de los españoles consideran que no existe un buen portal donde consultar esta información, un 28 % consulta a los portales de las universidades, un 23 % a Universia.es, un 12 % en aprendemas.com y un 7 % en Tumaster.com.

Uno de cada 10 puestos de trabajo está ocupado por empleados sobre cualificados

El boletín mensual de la Asociación de Grandes Empresas de Trabajo Temporal (AGETT) y Analistas Financieros Internacionales (Afi) (AML Afi-AGETT) acaba de publicarse con un análisis sobre los problemas para la productividad de la mala asignación entre puestos de trabajo y cualificación de empleados. Exactamente señala que el 9 % de los empleos no cualificados están desempeñados por trabajadores altamente cualificados.

Además, quince días antes de su publicación oficial, ofrece una estimación sobre los próximos datos de paro y vaticina que la EPA del ITR10 presentará una destrucción de 284 mil empleos con respecto al trimestre anterior (un -3,8 % interanual) y el paro se incremente en 230 mil personas, situando la tasa de paro en el 19,9 %. La EPA del ITR10 arrojará cerca de medio millón de parados más que en 2009. Por tanto, el paro crecerá y se superarán los 4,5 millones de parados, cerca de medio millón de desempleados más que en el mismo periodo de 2009.

En el IVTR09, un 36,1 % de la población ocupada tenía un alto nivel de estudios, frente al 27 % que había a principios del 2000. Sin embargo, pese a este avance, el 40 % de los ocupados españoles tan sólo tiene estudios hasta la primera etapa de la secundaria. Es decir, tienen un bajo nivel de cualificación.

José Antonio Herce, socio Director de Analistas Financieros Internacionales (Afi), destaca que “tenemos las juventudes mejor formadas de nuestra historia. Sin embargo esas cualificaciones no parecen estar a la altura de las circunstancias”.

Por ramas de actividad, los ocupados con estudios bajos se concentran en el sector primario (75 %), la construcción (59 %), algunas industrias manufactureras (56 %), el comercio y la hostelería (49 %). Por el contrario, las ramas de “Administración pública, educación y actividades sanitarias” y “Actividades de servicios financieros y a empresas” concentran más del 50 % de la población ocupada con alta cualificación en el IVTR09.

El aumento de la población ocupada con un alto nivel de estudios no se está traduciendo siempre en mejoras de productividad, sino que en buena parte de las ocasiones desemboca en un problema de sobre cualificación.

“Existe un desajuste entre la cualificación y las tareas que realiza la población ocupada, lo que evidencia que se está dando un desaprovechamiento relativo del capital humano capacitado en nuestro país. Para lograr una transformación eficiente del modelo productivo, es fundamental acercar el mundo educativo con el empresarial”, alerta Francisco Aranda, Presidente de AGETT.

En esta línea, José Antonio Herce, lamenta que a pesar del aumento en la formación de los ocupados, “las empresas se quejan sistemáticamente de que no encuentran los perfiles técnicos superiores que necesitan. Algo debe andar muy mal en la planificación educativa en España y en los incentivos a la formación de los jóvenes para que esta doble paradoja siga profundizándose en el tiempo”.

263.000 trabajos no cualificados son cubiertos por trabajadores altamente cualificados

El 9 % de las personas ocupadas en “Trabajos no cualificados”, poseen una alta formación, en el IVTR09. Esto supone que 236 mil trabajadores con un elevado nivel de estudios están ejerciendo tareas que no necesitan esta cualificación. En 2005 esta sobre cualificación tan sólo afectaba al 5 % de los ocupados.

Estas 236 mil personas altamente cualificadas que ejercen sus ocupaciones en tareas que no responden a su nivel de estudios, representan el 3,5 % del total de ocupados cualificados que hay en nuestro país.

“La sobre cualificación en España es cada vez más acusada, de ahí la necesidad imperiosa de alcanzar una intermediación laboral eficaz que ayude a unir puestos de trabajo con los perfiles profesionales que realmente necesiten las empresas. Esto acabará traduciéndose en una mayor productividad y en un verdadero aprovechamiento del capital humano de nuestros trabajadores”, reclama el Presidente de AGETT.

Como ejemplo opuesto a la sobre cualificación encontramos que en la ocupación “Trabajadores cualificados en la agricultura y pesca”, tan sólo el 8 % posee una alta cualificación. Esto indica que trabajadores con baja formación están llevando a cabo tareas que requieren un nivel de estudios superior.

En este sentido, Aranda reitera que “es igualmente improductivo desperdiciar las capacidades de mano de obra cualificada, como lo es ocupar a personas que no poseen la cualificación necesaria para desarrollar tareas que exigen un elevado nivel de formación”.

País Vasco y Madrid son las CCAA que poseen el mayor porcentaje de empleo cualificado.

El 51,2 % de los ocupados vascos presentan una alta cualificación, seguidos de cerca por Madrid, con el 44 %; La Rioja (41,2 %), Cantabria (40,8 %) y Navarra con el 40,2 %.

En el extremo opuesto están Extremadura, con el 51,7 % de los ocupados con baja cualificación; y Castilla La Mancha, con el 49,8 %.

Las significativas diferencias entre unas comunidades y otras se debe, en parte, a la distinta estructura productiva que requiere un perfil de cualificación en función de su especialización. Así, las regiones más industrializadas (como País Vasco, La Rioja y Navarra) o aquellas donde el peso de los servicios avanzados a empresas es especialmente importante, como en el caso de Madrid, presentan un mayor porcentaje de mano de obra cualificada. Sin embargo, las regiones en las que impera el sector primario, abundan los trabajadores con una baja cualificación.

Navarra es la CCAA que presenta un mejor ajuste entre ocupación y cualificación
Existen diferencias significativas en el desajuste entre cualificación y ocupación por CCAA. Navarra es la región que presenta un mayor ajuste entre el nivel de formación de sus trabajadores y las ocupaciones. En la comunidad foral, menos del 5 % de las tareas no cualificadas están ocupadas por trabajadores altamente formados (la media española es del 9 %), lo que supone un peso de 1,1 % sobre el total de mano de obra cualificada en la región (la media nacional se sitúa en el 3,5 %). Le siguen Galicia, con un 2,5 %; Cataluña, con un 2,6 %; y Extremadura, con el 2,7 %.

En el lado opuesto, las comunidades que cuentan con un mayor porcentaje de sobre cualificación en función del puesto de trabajo son Murcia, con el 5,3 %; Comunidad Valenciana, con el 5,2 %; y Baleares, con el 4,9 %.

No se espera que el paro siga aumentando en los próximos meses por causa de la destrucción de empleo, que se ralentizará hasta situarse por debajo del -3 % a partir de mayo por el periodo estival. El aumento del desempleo, de darse, vendría por los cientos de miles de trabajadores “desanimados” que podrían volver a la búsqueda de empleo.

Cuatro de cada 10 ocupados españoles tienen baja cualificación y en sólo dos ramas de actividad se concentran la mitad de los altamente cualificados.



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