WhatsApp

Día de los abuelos en soledad, pobreza y sin sueldo como cuidadores de nietos

Día de los abuelos: soledad, pobreza y sin sueldo como cuidadores de nietos
NOTICIA de Javi Navarro
26.07.2021 - 15:34h    Actualizado 23.01.2023 - 10:39h

“En España estamos asistiendo a un grave y creciente aumento de pobreza en la ancianidad con casi dos millones de mayores que viven solos; y de ellos 368.400 son mayores de 85 años. La soledad de los abuelos deteriora seriamente la calidad de vida de los abuelos”, explican desde la Fundación Madrina, que señala que el 1 % de las personas en las colas del hambre son mayores y ancianos, “y su número ha crecido un 63 % en los últimos 12 meses agravado por la pandemia”.

Hoy, 26 de julio, con motivo del ‘Día de los abuelos’ analizamos las reivindicaciones de este colectivo social que padece por un lado la falta de conciliación de los trabajos de sus hijos con lo que supone tener que hacerse cargo de los nietos y, por otro, la crisis Covid. Los abuelos se han convertido en canguros de sus nietos, una sobrecarga como cuidadores de los pequeños a su edad y sin remuneración que acaba afectando a su salud física y emocional. Estos ‘abuelos canguro’ son los héroes de la pandemia, puesto que han sido la clave para cuidar, educar y amortiguar el incremento de la pobreza materno-infantil el mayor desde la Segunda Guerra Mundial.

La importancia de los abuelos en los nietos

Para Fundación Madrina los abuelos son un pilar fundamental de la sociedad junto a los niños y la familia, son auténticos abuelos canguro y, sin embargo, no se les valora a pesar de sufrir en soledad. “Sin embargo, durante la pandemia han sido el soporte de miles de familias que se han visto desplazadas desde sus viviendas hacia la casa de sus padres, porque la pérdida de trabajo y la ausencia de ayudas sociales les ha impedido pagar durante meses el alquiler o al energía y arrastran grandes deudas que les ha ocasionado la suspensión de la luz, el agua o incluso el desahucio”, añaden desde Fundación Madrina.

Según una encuesta del CIS, el 43 % de los abuelos ayudan a su familia económicamente. Estas son las tareas principales de los abuelos en España según la encuesta del CIS.

La pensión mínima de un abuelo en soledad y que haya cotizado lo que manda la ley es de 639,50 €. Cantidad muy justa para vivir en caso de que tenga vivienda en propiedad y no le alcanza para vivir si debe pagar un alquiler. El problema viene cuando los hijos y nietos vienen a convivir en la misma vivienda, llegando en muchos casos a no poder comer, de acuerdo al siguiente cuadro de gastos para una pensión mínima de un mayor (639,50 euros/mes):

Gastos Vivienda propia Vivienda en alquiler
Luz 56 € 56 €
Agua 30 € 30 €
Gas 40 € 40 €
Transporte 6 € 6 €
Comunidad de vecinos / alquiler 100 € 300 €
Alimentación diaria 7 €/día 210 € 210 €
Higiene y limpieza 150 € 150 €
GASTOS FIJOS 593 € 793 €
Sobra 46,80 € -153,20 €

Entre las medidas económicas que hay en otros países, podemos destacar los ejemplos de Alemania, donde los ‘abuelos canguros’ pueden desgravarse durante los 14 meses siguientes al nacimiento del nieto -en el caso de que el padre o madre sufran una enfermedad y el cuidador no trabaje más de 30 horas a la semana-; o como en Portugal, donde los abuelos tienen derecho al 100 % del sueldo si se dedican al cuidado del nieto durante el mes siguiente a su nacimiento.

En este sentido, los abuelos canguro son los grandes héroes de esta pandemia, por ser primero víctimas de la misma y también por ser los amortiguadores sociales y humanos de la pobreza materno-infantil, empobreciendo ellos y teniéndose que alimentar en las colas del hambre. Por otra parte, los abuelos son los que educan a los niños ya que cada vez más en las familias se aprecian unos padres ausentes. Los adolescentes valoran mucho este acompañamiento y educación que les ha proporcionado sus abuelos.

El INE confirma el aumento sin precedentes del riesgo de la pobreza en familias residentes, especialmente la pobreza materno-infantil, que ha crecido hasta el 26 % de la población residente en España, y que los más damnificados por esta crisis han sido las familias con hijos menores a cargo, las familias monoparentales, y los ancianos.

En este sentido, se podría afirmar que son estos tres colectivos a los que se debería proteger especialmente, y por el contrario no tienen ninguna ayuda directa para sacarles de la pobreza extrema. En este sentido, para Fundación Madrina la presencia de niños en las familias aumenta por 10 la tasa de vulnerabilidad y riesgo de pobreza de la misma. Igualmente ocurre en las familias monoparentales que presentan hijos menores, la ausencia de uno de los progenitores en estas familias aumenta por dos la dependencia y vulnerabilidad de estos hogares. Y, por último, los más vulnerables, los abuelos en soledad, a los que hemos abandonado tanto la sociedad como sus propias familias. La mayor parte de estos ancianos carecen de ingresos adecuados por lo que literalmente se encuentran en riesgo de extrema pobreza.

Abuelos en colas del hambre

Según datos de Fundación Madrina han aparecido un 1 % de personas mayores cada día en las colas del hambre, y cada día más abuelos se acercan a las mismas a pedir alimentos para sus hijos y nietos, porque con la pensión nos les llega, y este incremento durante los últimos 12 meses ha crecido en un 63 %.

Por lo general, los abuelos suelen vivir solos o bien con los hijos a quienes mantienen con su pequeña pensión pagando el alquiler, por lo que vienen a las colas del hambre para comer. “En España estamos asistiendo a una grave y creciente aumento de pobreza en la ancianidad equiparable a la materno-infantil, es decir, se dan dos picos de pobreza en España en la infancia y en la ancianidad como consecuencia de la Covid.

El perfil de los abuelos que atiende Fundación Madrina es variado, con edades superiores desde los 65 años hasta los 90 años. Algunos de ellos se encuentran en situación de calle esperando la aprobación del Ingreso Mínimo Vital, o bien su pensión. Los más mayores son ancianos españoles o inmigrantes de larga duración, ya nacionalizados españoles, solos principalmente o con pareja, pero con una pensión mínima. “Algunos de ellos viven en una pensión o en una habitación, cedida temporalmente por servicios sociales, y no tienen para comer ni para transporte, por ello vienen a las colas del hambre”, explican los voluntarios de Fundación Madrina, que también denuncian sus problemas de movilidad, por lo que muchas veces esta fundación les lleva la comida a casa a través de voluntarios.

En Fundación Madrina se observa desde septiembre de 2020 que empieza a comenzar un fenómeno de reunificación familiar en pueblos y ciudades. Miles de familias con hijos menores han tenido que desalojar sus viviendas por desahucios, motivado por meses de impagos de alquileres y de facturas de energía, y la única solución ha sido ir a la casa de los padres. Así se ha visto como familias enteras de hasta 3 generaciones se hacinaban en la vivienda del abuelo, que mantenía con su pequeña pensión a sus hijos -que habían perdido trabajo y vivienda, y a sus nietos, y a veces hasta biznietos. Esto generaba que el abuelo con su pensión sólo podía mantener el alquiler o gastos de la casa y debía venir a alimentarse él, y a sus hijos y nietos en las colas del hambre.

Para paliar esta situación de soledad, Fundación Madrina entiende que el papel de la familia es fundamental. En concreto, el vínculo entre abuelos y nietos puede ayudar a vencer estas situaciones de aislamiento; ejercer el rol de abuelo es una forma de sentirse socialmente integrados, incrementando el bienestar, el sentimiento de utilidad, disminuyendo el sentimiento de soledad sobre todo en momentos de pérdidas.

Reivindicaciones para los abuelos

Desde Fundación Madrina se exigen a las autoridades medidas económicas y sociales para proteger a los abuelos, como por ejemplo:

  • El trabajo de los “abuelos canguro” en la familia extensa sea reconocido económicamente por el Estado, como en otros países, con una “salario base de cuidador”.
  • Equiparar las pensiones mínimas de los abuelos al salario base de supervivencia, por encima de los 1.000 €.
  • Reconocer el derecho de todo mayor a un hogar digno y a la sanidad pública integral, independientemente de su nacionalidad, de tener papeles o empadronamiento.
  • Proteger al mayor garantizando un “vinculo de apego seguro” del mismo con su familia y entorno.
  • Bonificar y gratificar el “cuidado del mayor dependiente” en el entorno familiar de forma directa.
  • Creación de más centros de día con más plazas para cubrir todas las necesidades de los mayores que así lo soliciten, bonificando a las familias que les lleven a dormir a casa.
  • Facilitar vivienda social protegida y permanente, para aquellas familias que “adopten a un abuelo” y le acompañen en sus últimos años con cariño y protección, haciendo un seguimiento estrecho del cuidado familiar.
  • Apoyar la entrega de viviendas en el entorno rural y de ciudades, para la constitución de familias que se adoptan entre sí “abuelos-madres-niños” “adopta un abuelo, adopta una madre con niño” ofreciendo ayuda directa para vivir, transporte y adaptar viviendas.
  • Fomentar desde servicios sociales y los tribunales que los niños puedan disfrutar el derecho de tener y convivir con sus abuelos, eliminando las “ordenes de desamparo” si hay familia extensa. El sueldo si se dedican al cuidado del nieto durante el mes siguiente a su nacimiento.



WhatsApp Casacochecurro