Los trucos de los ‘finfluencers’ para captar tu dinero según denuncia el Banco de España
Los peligros de seguir a finfluencers son tales que el Banco de España ha salido a dar unos consejos para evitar engaños. En un mundo donde la información en internet es abundante, pero no siempre fiable, los finfluencers han cobrado protagonismo en el ámbito de las finanzas y se dedican a promocionar consejos financieros a sus seguidores en redes sociales. Aunque muchos de ellos pueden parecer expertos, el Banco de España advierte que lo cierto es que muchos no cuentan con la formación adecuada o están impulsados por intereses ocultos. ¿Consejeros o estafadores? Lo que debes saber para proteger tu dinero.
Ante esta realidad, resulta esencial preguntarse: ¿de quién nos informamos y a quién confiamos nuestras decisiones financieras? Este es el título del último contenido difundido por el Banco de España para abordar la realidad de estos expertos en redes sociales y cómo debemos abordar la información financiera que divulgan, así como los intereses que les pueden mover para hablar de determinadas recomendaciones de compra.
En la actualidad, las redes sociales se han convertido en plataformas donde proliferan consejos sobre ahorro, inversión y generación de ingresos. Sin embargo, es importante destacar que muchos de estos finfluencers no están debidamente cualificados para brindar asesoramientos personalizados. A diferencia de los asesores autorizados, la mayoría carece de la formación específica ni están registrados para ofrecer tales recomendaciones, lo que puede dar lugar a situaciones peligrosas para tu capital.
Por ejemplo, un finfluencer puede sugerir invertir en criptomonedas o acciones de empresas sin conocer tu perfil como inversor, es decir, sin tener en cuenta aspectos tan cruciales como tus objetivos financieros o tu tolerancia al riesgo. Mientras que una estrategia puede ser beneficiosa para algunos, puede ser perjudicial para otros.
Además, se ha comprobado que ciertos finfluencers pueden tener motivos ocultos: recibir compensaciones por promocionar determinados productos, plataformas o inversiones. Esta práctica, acompañada por el uso de técnicas como el clickbait —títulos atractivos diseñados para captar atención—, puede hacer que sus recomendaciones sean más sospechosas. Algunos incluso ofrecen cursos o guías cuyo valor real es cuestionable.
La influencia de los sesgos cognitivos también juega un papel fundamental en la manera en que absorbemos la información. Entre estos, se destacan:
- Efecto halo: Tendemos a considerar expertos a quienes tienen muchos seguidores o se expresan con autoridad.
- FOMO (miedo a perderse algo): La presión de actuar por miedo a “perder” una oportunidad puede llevar a decisiones impulsivas.
- Sesgo de autoridad: Se confía en personas solo por su apariencia o forma de comunicarse.
- Efecto manada: La presión social nos impulsa a seguir la corriente sin cuestionar si es correcto.
- Sesgo de confirmación: Buscamos solo información que refuerza nuestras creencias, ignorando datos que las contradicen.
Para protegerte ante estas prácticas, el Banco de España recomienda que no tomes decisiones financieras basadas únicamente en lo que ves en redes sociales. Es vital que verifiques si la persona que comparte consejos está debidamente autorizada y consultes fuentes oficiales como la CNMV o el Banco de España. Si hay dudas, lo más prudente es buscar asesoramiento profesional.
Recuerda que tu dinero merece decisiones informadas y responsables. No te dejes llevar por promesas fáciles ni por modas virales.
