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Mujeres con alopecia, Causas, Tipos y Tratamientos

Mujeres con alopecia: causas, tipos y tratamientos
NOTICIA de Jessica Pascual
10.07.2021 - 09:51h    Actualizado 17.03.2023 - 12:58h

¿Se te caen mechones de pelo cada vez que te pasas el peine? Si te has detectado alguna zona con calvas en la cabeza y pierdes cabello de forma continuada, ya sea en la ducha, cada vez que vas a hacerte una coleta o te das cuenta de que dejas restos de pelos todas las noches en la almohada, puede que sufras algún tipo de alopecia femenina.

Aunque la alopecia es una enfermedad que se suele asociar a los hombres, las mujeres también la sufren. En cuanto a la calvicie femenina, se distinguen varios tipos: Alopecia androgénica, areata, por tracción, difusa o cicatricial son las más comunes, pero no las únicas. En esta guía te explicamos las causas, tipos y tratamientos para mujeres que sufren alopecia.

Qué es la alopecia femenina

La alopecia femenina consiste en la pérdida de la densidad del pelo en zonas de gran visibilidad del cuero cabelludo, es decir, en la parte superior y delantera de la cabeza. La calvicie por la alopecia se caracteriza por dos síntomas principales:

  • Caída y pérdida del pelo
  • Diminución del grosor y debilitamiento del cabello

A diferencia de los hombres, en las mujeres no es tan común llegar a una calvicie total. La conocida como calvicie de patrón femenino consiste en la pérdida progresiva del pelo y la aparición de calvas en las distintas zonas de la cabeza, pero siempre manteniendo algo de cantidad de pelo.

Cómo saber si tengo alopecia

Hay que tener en cuenta que todas las mujeres pierden pelo todos los días. Quedarte con unos cuantos cabellos en la mano al ducharte o al cepillarte no es tener alopecia. Con esta enfermedad la situación se agrava y es normal detectar zonas despobladas de pelo por la cabeza y falta de cantidad de cabello en general. En función del tipo de alopecia, podrás notar calvas en forma circular por distintas zonas de la cabeza, falta de cabello en la parte superior de la cabeza o en la parte frontal.

Para detectar la alopecia hay que estar siempre atentas a cualquier cambio o comportamiento extraño del cabello. La alopecia femenina puede aparecer a cualquier edad y en cualquier momento del año. Y no tiene por qué estar relacionada con un factor hereditario. En estos casos en los que la pérdida de cabello es constante y el resto de tu pelo pierde densidad y fuerza y notas que está débil, tienes que acudir al médico cuanto antes para que pueda realizarte un diagnóstico.

Causas

No hay una única causa que propicie la aparición de la alopecia en mujeres. Aunque entre los factores más comunes que la causan son:

  • Cambios hormonales, como por ejemplo con la menopausia. Aunque la alopecia no sólo se da en mujeres de avanzada edad. Desde que empiezan los primeros cambios hormonales es posible sufrir alopecia.
  • Los desequilibrios hormonales provocados tras el parto también son otro de los factores que pueden provocar la calvicie. Aunque en estos casos, tras la recuperación y estabilización hormonal, suele desaparecer.
  • También relacionados con las hormonas, si una mujer deja de tomar un tratamiento anticonceptivo, puede sufrir alopecia como efecto secundario.
  • Otros factores que causan la alopecia son enfermedades como tiroides.
  • Por fumar.
  • Mantener una mala alimentación que provoque una falta de nutrientes en el organismo y sufrir obesidad o anorexia.
  • Estar sometida a situaciones de estrés.
  • Envejecimiento.
  • Herencia genética.
  • Por el consumo de algunos medicamentos que la propicien.
  • Por abusar de tratamientos con químicos para alisar o moldear el cabello.
  • Por abusar de productos como secador o plancha que deterioren la fuerza del pelo.

De forma paralela a todas estas causas, las mujeres con alopecia pueden sufrir un gran impacto psicológico a causa de este deterioro y cambio físico. Los complejos y el estrés derivado de la pérdida del cabello pueden llegar a ser el detonante de otras enfermedades como la depresión o sufrir ataques de ansiedad.

Tratamientos

El tratamiento más eficaz para combatir la calvicie en mujeres es acudir a un médico para que te realice un diagnóstico. El especialista es el que estudiará tu caso a través de una exploración y determinará cuál es el mejor remedio para curarla, si es que lo hay. En términos generales, se distinguen tres tipos de tratamiento para la alopecia en mujeres:

  1. Por un lado, hay medicamentos específicos que pueden funcionar, aunque su recomendación debe estar sujeta a la prescripción médica.
  2. Por otra parte, hay tratamientos invasivos con inyecciones para fomentar la estimulación y crecimiento del folículo. Para someterte a cualquiera de estos tratamientos debes consultarlo antes con tu médico.
  3. Por último, es posible recurrir a cirugías y trasplantes de cabello o restauraciones capilares para fomentar el crecimiento del pelo en la zona despoblada.

En cualquier caso, es fundamental que un médico te explore para poner remedio cuanto antes e intentar frenar la alopecia. En todos los tipos de calvicie que te detalles en este artículo, la detección temprana es de gran ayuda para frenar la caída del cabello.

Además, algunos tipos de alopecia desaparecen cuando el factor que las genera también lo hace. Es decir, que si la caída del cabello está provocada por estrés, volverá a nacer cuando el factor estresante desaparezca de tu vida.

Tipos de alopecia en mujeres

Existen un montón de tipos de alopecia femenina, aunque hay cuatro que son los más comunes:

Areata

Este tipo de alopecia está relacionada con el sistema inmunológico. La caída del pelo en la alopecia areata se debe a que el organismo a través de anticuerpos mal formados, inflaman los folículos y, como consecuencia, se produce la ausencia de nutrientes. Con ello, se impide el desarrollo o crecimiento del pelo y se fomenta su caída.

La alopecia areata se manifiesta de una forma clara. Las personas que los sufren suelen tener calvas en forma circular por distintas zonas de la cabeza. El tamaño de las zonas despobladas dependerá de cada caso. Al principio suelen tener pocos centímetros, pero si no se tratan, pueden llegar a alcanzar un tamaño considerable.

Puede aparecer tanto en hombres como en mujeres, aunque sobre todo la sufre gente joven y la principal causa que suele provocarla es el estrés. Las zonas despobladas pueden estar localizadas en un lado de la cabeza o estar repartidas. Este tipo de alopecia aparece de forma repentina y el cabello en general se vuelve más débil.

Androgénica

Aunque la alopecia androgénica está relacionada con los hombres porque el origen del término hace referencia al sector masculino (‘Andro’), este tipo de alopecia también está presente en mujeres. Esto se debe a que está relacionada con la testosterona, hormona que también tienen las mujeres, aunque en menor cantidad.

Este tipo de alopecia es más común en las mujeres de más edad y se asocia a los cambios hormonales provocados por la menopausia. Aunque también puede deberse a un déficit de vitaminas o hierro o puede surgir por factores hereditarios.

La pérdida del cabello se produce sobre todo en la raíz del mismo, en la parte superior de la cabeza. Además, de la caída, el pelo que está próximo a la zona despoblada pierde color y volumen. En general, todo el pelo se queda más delgado y fino. Se diferencia de la anterior en que no hay círculos sin cabello por zonas de la cabeza, sino que la raya de la parte superior es más ancha y el pelo se vuelve más fino y delgado.

La alopecia androgénica tiene tres fases, según la clasificación de la Escala de Ludwig Olsen, en función de la cantidad de falta de cabello. La fase uno es la más leve y la tres es la de mayor calvicie.

Cicatricial o cicatrizal

La alopecia cicatricial se debe a un daño en el folículo piloso que impide el crecimiento del pelo. Se conoce como alopecia frontal fibrosante y consiste en la pérdida de cabello en la parte delantera de la cabeza, en la parte superior de la frente.

La principal diferencia de esta alopecia con las dos anteriores es que las personas que lo sufren notan calor e hinchazón en la zona despoblada así como una mayor sensibilidad y enrojecimiento. Aparece tanto en hombres como en mujeres en edad adulta. Al tener dañado el folículo, es muy complicada curarla y regenerar el cabello de nuevo.

Por tracción

La alopecia por tracción consiste en la pérdida del cabello a causa de su estiramiento. Normalmente es una alopecia temporal, pero si no se detecta y se pone tratamiento cuanto antes, puede convertirse en permanente. En este tipo de calvicie es normal notar dolor de cabeza y sensación de tirantez.

La alopecia por tracción aparece si mantienes el pelo en constante tensión. Es decir, si te haces coletas o trenzas muy fuertes todos los días que mantengan la raíz del pelo en constante tensión. La clave principal para evitar su propagación es dejar soltura al pelo y no recogerlo tan fuerte. Por el contrario, puedes recogerte el pelo pero de una forma más floja, sin apretar la goma.

Difusa

La alopecia difusa o efluvio telógeno consiste en la caída excesiva del cabello acompañada a la pérdida de su fuerza y espesor. La principal diferencia con el resto de alopecias es que en este caso, no provoca zonas despobladas o calvas, sino que aparece por toda la cabeza. El efecto de esta alopecia es una capa muy fina de pelo repartido por toda la cabeza pero visiblemente débil y con la cabeza despoblada en general.