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La impresionante ruta de El Zarzalar para caminar por el agua entre puentes y pasarelas

La impresionante ruta del Zarzalar para caminar por el agua a través de puentes y pasarelas de madera
NOTICIA de Jessica Pascual
02.06.2023 - 12:42h    Actualizado 05.07.2023 - 09:23h

La ruta de El Zarzalar, conocida también como la ruta del Cañón del Taibilla, es un recorrido que transcurre por la ribera del río y que lo cruza en numerosas ocasiones. Toda una aventura que permite a los visitantes disfrutar de un paseo rodeado de naturaleza con tramos de auténtica aventura al tener que sortear el agua del río mediante pasarelas de madera improvisadas y puentes colgantes.

La gran belleza y particularidad de la ruta es que hay que vadear y cruzar el río a uno y otro lado a través de los diferentes puentes y pasarelas que se han levantado a lo largo de todo el trayecto. Es de dificultad moderada y no está recomendada para personas con problemas de movilidad porque hay tramos estrechos en los que hay que tener especial cuidado en no caerse.

Características de la ruta

La ruta de El Zarzalar es un camino que transcurre por el interior del Cañón del Taibilla y que permite descubrir al visitante la inmensa variedad de flora y fauna de cada rincón de la zona. Se trata de un recorrido que bordea las riberas del río y que lo cruza en numerosas ocasiones a través de tablones y puentes de madera.

Puente que cruza el río

Es un recorrido de tipo circular que se extiende a lo largo de 9 kilómetros aproximadamente. El tiempo estimado en completar todo el camino es de unas 3 horas, aunque la duración varía directamente del ritmo del paseo y de la cantidad de paradas que se realicen. El agua es la gran protagonista de la ruta y hay infinidad de tramos en los que su paso está controlado por puente o pasarelas y en otros en los que aparece en cualquier rincón.

Puente colgante de la ruta

Los 5 puntos más espectaculares de la ruta

La ruta de El Zarzalar es famosa y conocida por la gran cantidad de puentes y estructuras de madera levantadas en plena naturaleza que sirven al senderista para sortear el río y cruzarlo en numerosas ocasiones. Es un camino con una dificultad moderada por la particularidad de ciertos tramos, puesto que en ocasiones es necesario agarrarse a una cuerda anclada a la pared para caminar por unas tablas de madera bastante estrechas que discurren en los márgenes el río.

Pasarelas y puentes colgantes

Ruta paseo con tablones de madera

La ruta comienza en el parking gratuito de la localidad de Nerpio. Desde este punto, el visitante tiene que dirigirse hacia un camino asfaltado con hormigón que inicia el descenso hasta la Hoz y con el que se abandona la localidad. El siguiente punto que hay que alcanzar en la ruta es la depuradora de Nerpio. Y, una vez aquí, continuar el paseo por la ribera del río Taibilla.

Una de las particularidades y atractivos de la ruta es que el senderista puede cruzar en continuadas ocasiones el río sin mojarse los pies, gracias a los pequeños puentes de madera que hay sobre el agua. Sin olvidar otras en las que hay que ayudarse de cuerdas y cadenas que cuelgan de una pared sobre el río para cruzar, tal y como puedes ver en la siguiente imagen.

Senderistas cruzando

En este primer tramo es de especial interés el puente colgante en el que solamente puede pasar una persona a la vez y para bajarlo hay una escalera de troncos en la que hay que tener especial cuidado para evitar accidentes. Al llegar a la antigua presa hay que continuar cruzando el río hasta localizar una pequeña cascada.

Escalera con troncos

Pasarelas de madera en la pared

Otra de las zonas más bonitas, de mayor aventura y más fotografiadas de la ruta son las pasarelas de madera que hay incrustadas en la pared. Consisten en tablas pegadas a la roca, que se encuentran situadas encima del agua del río y que sirven de paso a los senderistas. Es la única forma que hay que cruzar estas zonas repletas de agua y, para que sea más fácil, hay cuerdas instaladas en las paredes de las rocas que permiten agarrarse para cruzar de una forma más segura.

Ruta del zarzalar

Presa con cascada

En uno de los puntos del recorrido se alcanza la antigua presa que da lugar a una pequeña cascada. No es de grandes dimensiones, pero sí de enorme belleza. Es un remanso de paz en medio del camino que permite al visitante parar a descansar y disfrutar de la naturaleza en su máximo esplendor con el sonido del agua cayendo.

Presa y cascada

Playa los Chopos

Otro de los puntos de interés de la ruta es la conocida como Playa Los Chopos. Es una zona que está marcada en el itinerario oficial de la ruta y un lugar donde parar a descansar.

Zona de la cascada

La Chopera

La Chopera es uno de los puntos del camino donde el paisaje se llena de árboles caídos que abrigan las riberas del río. Tiene una belleza particular y permite al visitante caminar entre grandes árboles mientras escucha de fondo el sonido del agua correr.

Zona de la Chopera

Descripción de la ruta

La ruta puede iniciarse a pie desde la localidad de Nerpio, donde es posible dejar el coche aparcado en cualquiera de los puntos de la localidad. A continuación, hay que seguir el camino que va paralelo al río de las Acedas, en un constante descenso hasta llegar a la depuradora de aguas residuales. A partir de este punto, el río Acedas se junta con el Taibilla y a unos 200 metros hacia abajo empieza el cañón y la ruta de senderismo de El Zarzalar.

Puente colgante de Zarzalar

El recorrido está flanqueado por dos altos muros y permite atravesar el cañón, así como diferentes rincones con oquedades que se han formado por el propio paso de la naturaleza.

Quién puede hacer la ruta

Esta es una ruta que puede realizarse a cualquier hora del día, siempre que haya luz natural. Para disfrutar del máximo esplendor de la naturaleza, las épocas más recomendadas son la primavera, el verano y el otoño.

Puente con malla

Se puede acceder a ella a pie, a través de la localidad de Nerpio. En cuanto al tipo de público, no es apta para personas con movilidad reducida, puesto que hay tramos de la ruta muy estrechos sin adaptaciones. Y, en cuanto a los niños, depende de la edad. Si son muy pequeños, hay tramos que les resultará bastante complicado, por lo que las recomendaciones señalan a que los niños sean de más o menos 10 años como mínimo para hacerla.

Vegetación de la ruta

Panorámica de Zarzalar

La ruta permite descubrir al visitante una gran variedad de fauna y de flora que habita en cada uno de los rincones del recorrido. En concreto, a lo largo del trayecto el camino va a deleitar al visitante con una gran cantidad y variedad de vegetación en la ribera del río. Desde ejemplares de zarzas, juncos, mimbreras y una inmensa población de fresnos, chopos, nogales y álamos.



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