El significado de dormir con la televisión encendida, según los psicólogos

¿Eres de los que necesita tener la televisión encendida para dormir? Se trata de una práctica común para muchas personas que buscan conciliar el sueño. Aunque puede parecer una solución inofensiva, los expertos en psicología y salud advierten sobre los posibles efectos negativos de este hábito. La exposición a la luz y el sonido del televisor durante la noche puede interferir con el proceso natural del sueño, afectando la calidad del descanso y, a largo plazo, la salud general.
Pero, ¿qué lleva a alguien a necesitar este estímulo para poder dormir? A continuación, exploraremos las características y comportamientos típicos de las personas que dependen de la televisión para conciliar el sueño. De igual modo, la psicología también puede explicar por qué hay personas que duermen abrazando una almohada.
Contenido de la información:
Búsqueda de compañía y superación de la soledad
Para algunas personas, especialmente aquellas que viven solas, el silencio nocturno puede acentuar sentimientos de soledad. El sonido y la luz de la televisión proporcionan una sensación de compañía, creando un ambiente menos solitario y más reconfortante. Este ruido de fondo actúa como una presencia que ayuda a mitigar el aislamiento.
Necesidad de ruido de fondo para calmar la mente
Individuos con mentes hiperactivas o que experimentan ansiedad pueden encontrar en el ruido de fondo de la televisión una herramienta para distraerse de pensamientos intrusivos o preocupaciones. El sonido constante sirve para enmascarar el silencio que, en algunos casos, puede intensificar la rumiación mental, dificultando la conciliación del sueño.
Miedo al silencio y a la oscuridad
El silencio absoluto y la oscuridad total pueden generar incomodidad o incluso miedo en algunas personas. La televisión, con su luz tenue y sonido constante, ayuda a crear un ambiente menos intimidante, proporcionando una sensación de seguridad que facilita el sueño.
Rutina y hábito establecido
Para muchos, encender la televisión antes de dormir se ha convertido en una parte integral de su rutina nocturna. Este hábito, repetido a lo largo del tiempo, señala al cuerpo que es hora de relajarse y prepararse para el sueño. La ausencia de este ritual puede dificultar la transición al estado de reposo.
Intento de enmascarar otros ruidos ambientales
Algunas personas utilizan la televisión para cubrir ruidos externos que pueden ser molestos, como el tráfico, vecinos ruidosos o incluso ronquidos de una pareja. El sonido del televisor actúa como una barrera que bloquea estos ruidos indeseados, creando un entorno más propicio para el sueño.