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Las cinco clases de morosos según el estatus social y económico

Las cinco clases de morosos según el estatus social y económico
NOTICIA de Javi Navarro
23.02.2010 - 10:21h    Actualizado 23.03.2023 - 16:11h

En los últimos meses, agravado por la situación económica que atraviesa el país, el perfil del moroso se ha modificado y ampliado. ¿Y cómo saber si estoy en una lista morosos? De una forma u otra, un estudio destaca cinco grandes grupos, cada uno de ellos con su perfil predominante, casuística y problemática concreta. El estudio diferencia dos tipos de préstamos principales: por un lado hace referencia al préstamo consumo y por otro al préstamo hipotecario.

Cinco clases de morosos:

En el primer caso, un préstamo hipotecario es un contrato en virtud del cuál el banco, Caja, EFC (establecimiento financiero de crédito) o la mercantil o el particular “x” presta un dinero a cambio de un interés (su beneficio) y un plazo de devolución que suele ser mes a mes, en letras o recibos. En este caso, cuando hay impago y no hay solución amistosa, el suscriptor responde con todos sus bienes, actuales o futuros y el inmueble es lo primero que se “ejecuta” en subasta pública de la siguiente manera: si cubre la hipoteca más los costes del procedimiento judicial y de máxima responsabilidad (anteriormente definidos en la escritura del préstamo hipotecario) se extingue la deuda. “En caso de no cubrir la deuda se procede contra los otros bienes y/o derechos que tiene quien ha suscrito la hipoteca”, explica José Antonio Villegas, director general de la empresa de gestión de morosos Solucionados, autora del estudio.

El estudio realizado por el grupo Solucionados realiza una segmentación utilizando criterios que tienen que ver con la realidad y la situación socioeconómica y sociocultural en España.

El primer grupo “Familias españolas con recursos limitados por la crisis”

Se trata de un perfil en alza dado que esta situación va aparejada a la falta de capacidad para encontrar empleo ya que el nivel de cualificación de los miembros no es muy alto. El tratamiento que ofrece Solucionados a este perfil es el de identificar si la situación de mora es transitoria y proyectar una solución en tiempo y forma con los clientes. Es posible renegociar la deuda o es posible evitar el procedimiento judicial con negociaciones de todo tipo que pueden incluir la entrega del bien o la cancelación. Las familias pueden ayudar mucho en estos casos. Buscar, en cualquier caso, acuerdos de pago factibles.

El segundo gran grupo “Familias españolas que tienen que ajustar su realidad a la situación actual”

Se trata de perfiles muy complejos pero su denominador común es el sobre endeudamiento. En este caso, el tratamiento que ofrece la compañía es producir una redefinición de la realidad de la familia con la venta de activos o negociación de los mismos con las entidades que correspondan. Buscar, en cualquier caso, acuerdos de pago factibles.

El tercer grupo abarca “Familias españolas de procedencia latinoamericana o países del este con recursos limitados por la crisis”

Se trata de un perfil en alza dado que esta situación va aparejada a la falta de capacidad para encontrar empleo ya que el nivel de cualificación de los miembros no es muy alto. El tratamiento que aplica Solucionados a este grupo consiste en identificar si el cliente quiere o no quiere quedarse en España. Si es así analizar su realidad y proyectarla junto a el y el acreedor para conseguir evitar la situación. En los casos de impago estructural es conveniente tratar dación en pago de bienes y redefinir los acuerdos. Buscar en cualquier caso acuerdos de pago factibles.

El cuarto grupo se subdivide a su vez en diferentes categorías; son las “Familias Monoparentales”:

1.- Personas solteras de entre 30 y 40 años:

Jóvenes con empleo de cierta cualificación que han vivido en una realidad superior a sus posibilidades (acentuada por el sobreendeudamiento anterior a la crisis. Las soluciones que se intentan aplicar son identificar si la mora es estructural, que suele serlo y disolver activos. Si nos los hay, buscar acuerdos de pago factibles.

2.- Personas solteras mayores de 40 años y menores de 50 años:

Personas con un trabajo de cierta cualificación que incorporan la cualidad anterior (vivir por encima de sus posibilidades) y rupturas que si son con hijos suponen un menoscabo en la capacidad de pago brutal. El tratamiento aplicable por Solucionados es Identificar si la mora es estructural y disolver activos. Buscar acuerdos de pago factibles, en cualquier caso.

3.- Familias pensionistas o monoparentales o multi:

Personas mayores que han contraído deudas como consecuencia de su falta de organización financiera. El tratamiento en estos casos consiste en buscar acuerdos que impliquen una resolución estructural de la deuda evitando a toda costa el procedimiento judicial.

El quinto y último grupo refleja un perfil de “Familias de la Unión Europea que disponen de una segunda residencia en España”:

Son familias que dejan el inmueble a su suerte o simplemente no es posible contactarles porque no están ni quieren estar en España. En este caso el tratamiento al que procede la compañía es el de buscar acuerdos extrajudiciales que aminoren costes y tiempo de adjudicación.

Como conclusión final el estudio especifica que, en cualquier caso, es posible encontrar la fórmula de pago o cancelación siempre que el deudor esté por la labor y, por supuesto, el acreedor tenga la sensibilidad necesaria. “Todos los días resolvemo cientos de casos a través de nuestras 88 oficinas que actúan como corner de gestión de cobro de los bancos, cajas y entidades financieras que trabajan con nosotros. Simplemente escuchamos y proyectamos”, concluye José Antonio Villegas.



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