Los radares de la DGT que te multarán por circular con exceso de ruido

El llamado ‘Medusa’ es uno de los nuevos radares de la DGT que ya ha aterrizado en España y cuyo principal objetivo es controlar el nivel de emisión de ruido de los coches en zonas residenciales. A diferencia de los tradicionales radares de la DGT, que se centran en la vigilancia y control del exceso de velocidad de los vehículos, este nuevo dispositivo va a controlar el ruido que emiten los coches.

Su nombre hace honor a su diseño, puesto que tiene un montón de tentáculos que simulan el aspecto del animal. El dispositivo incorpora varios micrófonos para captar el nivel de emisiones acústicas y una cámara de vídeo que permite identificar a los infractores. De momento, está en una fase experimental en España y todavía no multa.

Cómo funciona el radar medusa

Este tipo de radares miden y registran el sonido de todas las direcciones que se encuentren alrededor del dispositivo, con un radio de actuación de 360 grados. El objetivo es localizar aquellos vehículos que al circular emitan un nivel de ruido superior al permitido.

Además de detectar este nivel de sonido, los radares llevan incorporada una cámara de vídeo que permite identificar a los vehículos infractores para que el ayuntamiento pueda localizarlos y enviar la correspondiente sanción.

Dónde están los radares medusa

En España, de momento solo hay un radar medusa instalado. Se encuentra en la carretera C31 de Barcelona y está en una fase experimental de pruebas. Es decir, que está funcionando, pero no multando. El objetivo de este periodo previo es comprobar su efectividad a la hora de detectar los distintos niveles y emisiones acústicas.

Cuál es el límite de ruido permitido para los coches

El ruido máximo que puede hacer un coche en España de momento está por determinar. Una vez concluyan la fase de pruebas y, en el caso de que decidan implantar y extender el uso de este tipo de radares a todo el país, se dictará un nivel máximo permitido. En la actualidad, la normativa al respecto establece multas por superar los 90 decibelios en zonas residenciales.

Sanciones por exceso de ruido

En cuanto a las sanciones por superar los decibelios permitidos en cada caso, serán de carácter económico y dependerán de la normativa que establezca cada municipio.

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